miércoles, 27 de junio de 2007

Si no gobierno me voy

El último en hacer la jugada ha sido Jaume Matas. Como no puede gobernar, se va a su casa, bueno a sus negocios. Otros muchos lo han hecho antes. Uno de los últimos Miguel Sebastián; tras jurar y perjurar que si no ganaba sería el líder de la oposición, en vista de que pierde se vuelve a su cátedra. Es un planteamiento realmente curioso, ya que, en teoría, los candidatos se presentan para representarnos, pero en la práctica solo lo hacen para gobernar. Es decir, un sistema presidencialista. Un duelo entre dos cabezas de lista. Los demás van de relleno. Si el cabeza de lista pierde, al grupo que la parta un rayo y que se busque otro líder. Claro que así el engañado es el elector. Vota a un dirigente y luego su tarea la hace otro.
Pero hay otros peores, los que se van tras gobernar unos meses. Ya veremos cuánto nos dura Gallardón. Mucho prometer que será alcalde cuatro años, y a la mínima ocasión se va detrás de su queridísimo Mariano, y nos deja a Botella de alcaldesa. Y sino, al tiempo.
En realidad, hay que ver lo positivo de todo esto, y es que los políticos valen para todo; por ejemplo, en la Comunidad de Madrid, muchos han cambiado de cartera; la razón es que son “buenos gestores”, y, por tanto, pueden gestionarlo todo: el que se ha inventado el fin de las listas de espera ahora se va a inventar que los trenes del Metro nunca se estropean; el que ha terminado con la violencia de genero, ahora va a terminar con la Sanidad pública; y la que ha gestionado la “integración” de un millón de inmigrantes, ahora va a organizar su educación.
Son políticos polivalentes, o polivalientes, porque se atreven con todo. De todo saben y todo lo gestionan bien, y si pierden, aunque sea por la mínima, pues a vivir de los negocios, que eso también saben hacerlo. Al fin y al cabo en el mundo empresarial, pasa lo mismo, todo el mundo sabe de todo. Se gestiona unos meses o años una empresa, se aplica regulación de empleo, se subcontratan ciertos servicios para reducir cargas salariales, se despilfarran las ayudas públicas, se deja la empresa con pérdidas, y luego te buscas otra empresa. Como ya tienes fama de buen gestor, en pocos días se te rifan. Y sino, con un poco de suerte tu partido te vuelve a llamar. Ventajas de valer para todo.
Carlos Cistue

1 comentario:

Anónimo dijo...

Una de las razones por las que me interesa el partido ciudadanos es la las ganas de cambiar hacia una formas mejores de hacer la sociedad y la politica eso que algunos llaman "regeneracion" pero que yo llamaria "generacion".

Por ello tiendo a desconfiar de los expertos o con experiencia política, que pueden aporta viejas maña y que en general, tienden a pensar que las cosas se hacen de una determinada manera.
Por que traigo esto a coalicion, por Luis Bouza-Brey. No le conozco, pero me escama que su mayor activo para su candidatura en Ciudadanos se su "experiencia política". Por ello pido a Luis Bouza-Brey que demuestre que su interes no es llegar con ciudadanos donde no pudo hacerlo con el PSC