viernes, 25 de mayo de 2007

¡Que viva Verdi! (y cuarta parte)


España es un país que nunca ha valorado a aquellos que dieron su vida por ella, que se sacrificaron por una idea de Modernidad que, sin embargo, encontraba en la pasividad de los españoles, su subordinación al Poder y, sobre todo, en su resignación ante los abusos y las injusticias cotidianas de los poderosos, a su peor enemigo antes que el absolutismo de los Reyes, las injerencias de la Iglesia o los pronunciamientos del Ejército. ¿Quién se acuerda ya de Mariana Pineda y de la bandera liberal que bordó con su propia vida entregada al ‘garrote vil’ por haber pronunciado la palabra Libertad? ¿Quién se acuerda ya de los Héroes del 2 de Mayo a no ser porque en la plaza que lleva su nombre se celebra el ‘botellón’?. ¿Saben nuestros escolares que en la Plaza de la Lealtad están depositadas las cenizas de muchos de aquéllos? ¿saben que en París hay una placa que conmemora la aportación de los republicanos españoles a la liberación de Francia en la Segunda Guerra Mundial y aquí no hay ninguna?. Restablezcamos, entonces, los auténticos símbolos comunes si queremos crear Nación, sin miedo, sin complejos, antes bien, orgullosos de ser españoles.

Arnaldo Santos

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy buena tu serie de artículos Arnaldo...espero más como estos...

Anónimo dijo...

Solidaridad con Ciutadans
Un fraternal saludo desde

http://jarabeautentico.blogspot.com

Anónimo dijo...

Estoy horrorizado vaya indigestión ideológica.